miércoles, 5 de noviembre de 2014

CONOCIENDO OTRO ENEMIGO..... EL EBOLA

UNO DE ESOS MICROORGAMOS QUE NOS ACECHAN ES UN VIRUS QUE MUCHOS CATALOGAN COMO EL ASESINO NUMERO UNO

EL EBOLA

¿Qué es Ébola?
Ebola virus El virus del Ébola es un virus de la familia Filoviridae y género Filovirus, situación taxonómica que comparte con el virus de Marburgo.
Este nombre proviene del río Ébola (en la República Democrática del Congo, antiguo Zaire), donde fue identificado por primera vez en 1976 durante una epidemia con alta mortalidad.
El virus del Ébola causa fiebre hemorrágica viral, la cual se refiere a un grupo de virus que afectan a múltiples sistemas de órganos en el cuerpo y con frecuencia se acompañan de sangrado. Los primeros síntomas incluyen la aparición repentina de fiebre, debilidad, dolor muscular, dolores de cabeza y dolor de garganta. Más tarde progresan a vómitos, diarrea, alteración de la función renal y hepática – y sangrado a veces interno y externo. El virus se propaga a través del contacto con los órganos y fluidos corporales tales como sangre, saliva, orina y otras secreciones de las personas infectadas. Es el causante de la fiebre hemorrágica del Ébola o enfermedad del Ébola,1 una enfermedad infecciosa muy grave, que afecta tanto a seres humanos como otras especies de mamíferos.



Virología
Las dos especies tipo del género Filovirus, el único conocido en la familia Filoviridae. Esta familia comparte muchas características con las familias Paramyxoviridae y Rhabdoviridae; todas conforman el orden Mononegavirales.
El virus del Ébola no presenta reacciones serológicas cruzadas con el virus de Marburgo. Esto permite su identificación serológica.
Morfología
Tanto el virus del Ébola como el virus de Marburgo son virus pleomórficos (de morfología variable), cuyos viriones suelen presentar formas filamentosas (de ahí su catalogación como “filovirus”; ver imagen) que pueden alcanzar grandes longitudes (hasta 14 000 nm); sin embargo, presentan un diámetro bastante uniforme (aproximadamente 80 nm).
El genoma del virus consiste en una molécula única de ARN monocatenario lineal de polaridad negativa (19,1 kb) que tiene la información codificada para siete proteínas estructurales que forman el virión.
El virión está constituido por un nucleoide proteico con forma tubular (20-30 nm de diámetro) rodeado por una cápsida helicoidal (40-50 nm), recubierta a su vez por una membrana regularmente espiculada, su envoltura viral, estructuralmente integrada por una única glicoproteína viral.
El nucleoide está constituido por dos tipos de proteínas: la proteína NP, cuya función es estructural, y la proteína L, una ARN polimerasa. La cápsida se conforma por varias proteínas: proteína P, VP30 (proteína que le permite desdoblarse dentro de una célula hospedadora), VP35, VP24 y VP40. Las proteínas VP24 junto con la VP40 forman una matriz que mantiene unidos el nucleoide con la cápsida (nucleocápsida viral).
Epidemiología
Brotes de fiebre del Ébola en África desde 1979 a 2008.

El virus se transmite por contacto directo con líquidos corporales y excreciones infectados como la sangre, la saliva, el sudor, el semen, el flujo vaginal, sumado a los líquidos biológicos de estudios bioquímicos como el cefalorraquídeo, el sinovial, el pleural o el peritoneal, además de la orina, las heces, o los vómitos, tanto de animales —principalmente simios y murciélagos— como en humanos, ya sea vivos o fallecidos. También por contacto indirecto a través de fómites o reservorios animales: aquéllos que presentan la infección en forma asintomática (sin síntomas) pero contagiosa. Las ceremonias de inhumación que se celebran en ciertas aldeas africanas debido a la idiosincrasia parecen estar relacionadas en el contagio, ya que los miembros del cortejo fúnebre entran en contacto directo con el cadáver.2 La causa del caso índice aún es desconocida.
El período de incubación varía de 2 a 21 días, aunque lo más normal es de 5 a 12 días.
Se considera que los murciélagos frugívoros, en particular Hypsignathus monstrosus, Epomops franqueti y Myonycteris torquata, son posiblemente los huéspedes naturales del virus del Ébola en África. Por ello, la distribución geográfica de los Ebolavirus puede coincidir inicialmente con la de dichos murciélagos.4
En el año 1976 murieron alrededor del 92 % de los infectados.
Dada la naturaleza letal del Ébola, ya que no existe una vacuna aprobada5 o el tratamiento no está disponible, está clasificado como un agente de bioseguridad de nivel 4, así como de Categoría A un agente de bioterrorismo por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades. Tiene el potencial de servir como arma para su uso en la guerra biológica. La eficacia como arma biológica se ve comprometida por su letalidad rápida ya que los pacientes mueren rápidamente antes de que estén en condiciones de propagación del contagio.
En el 2014 en los Estados Unidos fue probado un suero de manera experimental en dos personas contagiadas por este virus; tal suero podría ser la cura para esta enfermedad aunque no se tienen más detalles del mismo. En España en 2014 también se aplicó este suero a un paciente, que sin embargo 2 días después falleció.6
Número básico de reproducción – R0

El número básico de reproducción – R0 del ébola es bajo comparado con otras enfermedades contagiosas como SARS, SIDA, o la gripe española de 1918, esto significa que cada caso individual produce menos contagios que estas enfermedades durante el período de infección del paciente. En el caso del ébola el R0 se encuentra entre 1.2 y 1.9 lo que significa que cada persona infectada, en promedio contagiara a entre 1.2 y 1.9 personas durante la duración de la misma.
Zoonosis
La zoonosis, más específicamente la antropozoonosis: contagio de animales a humanos, es de suma importancia estudirala en la epidemiología de las enfermedades infecciosas humanas. En cuanto a esta patología específica, en un estudio científico en Gabón, en donde se habían registrado casos humanos del Ébola, se ha investigado una muestra de perros silvestres que llegarían a comer animales salvajes posiblemente infectados, los cuales presentaron estudios serológicos del 32% positivos a anticuerpos específicos contra el virus en cuestión.
Dichos estudios llegaron a la conclusión, en el año 2005, de que los animales domésticos pueden por lo tanto infectarse y excretar el virus durante un período determinado para cada especie animal, convirtiéndose así en una fuente de infección para los humanos. Es muy necesario evaluar el papel de los perros domésticos en las epidemias de la enfermedad y poder así controlarla, según el Instituto de Investigación para el Desarrollo de París.
En la actualidad, octubre de 2014, surgió un caso de Ébola en Madrid por contagio de una enfermera auxiliar que se dedicaba a la atención de un segundo enfermo de Ébola traído desde África que terminó falleciendo, convirtiéndose así en el primer caso de esta enfermedad pandémica contagiada fuera de África. Su marido, quien mantuvo mayor contacto con dicha enfermera auxiliar, presenta serología negativa por el momento, pero las autoridades, ante el riesgo, determinaron sacrificar unilateralmente al perro de la familia llamado Excálibur sin haberle realizado estudio serológico alguno. Esto hizo imposible comprobar si el animal había podido ser fuente de contagio o, eventualmente, estudiar la actividad del virus en animales domésticos. El dueño no autorizó el sacrificio.8
Este tema en particular es de potencial importancia para estudios y seguimientos de la enfermedad en animales domésticos, en este caso con un perro, para determinar si efectivamente estos animales representan un foco de infección en las epidemias del Ébola, ya que las aldeas africanas afectadas están con sobrepoblación de los mismos, tanto domésticos como asilvestrados.
Afección en poblaciones de simios
Los autores del estudio han comprobado que el desfase del inicio de la mortandad entre los distintos grupos de gorilas vecinos es muy cercano a la longitud del ciclo de la enfermedad de ZEBOV (doce días), lo que evidencia que la transmisión de grupo a grupo ha amplificado la mortandad mencionada. La investigación concluye que la muerte de más de 5000 gorilas en el área de estudio es un caso único de pérdida de efectivos en una población animal en tan poco tiempo y, a la vez, manifiesta que la transmisión entre familias amplifica los episodios de mortandad. Hasta ahora se especulaba sobre la hipótesis de que la transmisión se producía a través de diversos focos de contagio entre la especie portadora del virus y los gorilas (Nature publicó un artículo a principios de 2014 en el que se señalaba la posibilidad de que fueran algunas especies de murciélago).


Aparición de cepas y brotes del Ébola
Ebola



La cepa Ébola-Zaire tiene la mayor tasa de mortalidad, hasta 90 % en algunas epidemias, con una media de un 83 %.

El primer brote tuvo lugar el 26 de agosto de 1976 en Yambuku, una ciudad del norte de Zaire (actualmente, República Democrática del Congo). El primer caso registrado fue Mabalo Lokela, un profesor de escuela de 44 años que volvía de un viaje por el norte del Zaire. Su alta fiebre fue diagnosticada como un caso de malaria, y en consecuencia se le administró quinina. Lokela volvió al hospital cada día; una semana después, sus síntomas incluían vómitos incontrolables, diarrea sangrienta, dolor de cabeza, mareos y dificultades respiratorias. Más tarde empezó a sangrar por nariz, boca y ano muriendo el 8 de septiembre de 1976, apenas 14 días después de manifestársele los primeros síntomas.

Brote de Ébola en África Occidental de 2014

En 2014 surgió el mayor brote de la historia de esta cepa[cita requerida] y también el mayor brote de ébola hasta entonces, afectando inicialmente a Guinea-Conakry y expandiéndose posteriormente a Sierra Leona, Liberia y Nigeria.
El 8 de agosto de 2014, la OMS decretó la situación como “emergencia pública sanitaria internacional” y recomendó medidas para detener su transmisión en medio de la expectante preocupación mundial ante el riesgo de pandemia global. Entre ellas, pedía a los países donde se habían detectado afectados que declarasen emergencia nacional y hacía una llamada a la solidaridad internacional.
La declaración se producía al rondar la cifra de 1000 fallecidos por la epidemia que amenazaba con seguirse extendiendo tras fallar los mecanismos de contención iniciales. Los primeros afectados transportados oficialmente a Estados Unidos durante el brote, fueron llevados a Atlanta para ser tratados con ZMapp[cita requerida], un suero experimental procedente de Ginebra que había dado resultados positivos con simios. El día 9 de ese mes se confirmaba que España había recibido dicho fármaco
Primer contagio de Ébola fuera de África

El 7 de octubre de 2014 se declara en el Hospital Carlos III de Madrid (España) el primer caso de contagio de Ébola fuera de África10 (véase también: Ébola en España).Una de la auxiliares de enfermería que atendieron al misionero repatriado desde Sierra Leona Manuel García Viejo (fallecido a causa del virus) resultó contagiada por la enfermedad. El sindicato de funcionarios CSI-F, que afirma haber advertido con anterioridad que “el Hospital no disponía de infraestructuras para abordar un virus de este calado”, achaca el contagio de la auxiliar de enfermería a “al desmantelamiento del hospital Carlos III de Madrid, a los recortes en el presupuesto sanitario, a la falta de medios y formación a los trabajadores sanitarios para tratar esta enfermedad y a que el protocolo no ha funcionado adecuadamente”.

Cepa Ébola-Sudán

El Ébola-Sudán fue la segunda cepa clasificada del virus, en 1976. Aparentemente se originó entre los trabajadores de una fábrica de algodón en Nzara, Sudan, ya que el primer caso registrado fue uno de los trabajadores. Sin embargo, los científicos que analizaron a todos los animales e insectos que había en la fábrica, no pudieron encontrar ninguno que diese positivo al virus Ébola. El transmisor original aún se desconoce.

Cepa Ébola-Reston

Apareció en noviembre de 1989 en un grupo de cien macacos (Macaca fascicularis) importados desde Filipinas hasta Reston (Virginia), EE. UU.. Otro cargamento de macacos infectados fue también enviado a Filadelfia, EE. UU. Esta epidemia fue altamente letal en los macacos, pero no causó ninguna muerte entre los humanos. Sin embargo, 6 de los encargados de manipular los animales dieron positivo al virus, dos de ellos debido a una exposición previa. Sobre este incidente el escritor estadounidense Richard Preston escribió un libro de notable éxito:22 The Hot Zone,23 traducido al español con el título de Zona caliente. Más monos infectados con Ébola-Reston fueron enviados de nuevo a Reston y Texas en febrero de 1990. También se detectaron en 1992 en Siena (Italia) y en Texas de nuevo en marzo de 1996. Ningún humano fue infectado en estos últimos brotes.
El 23 de enero de 2009, el Gobierno de Filipinas anunció la detección de anticuerpos IgG frente al virus Ebola Reston (ERV) en una persona que podía haber estado en contacto con cerdos enfermos.
El 30 de enero de 2009, el Gobierno filipino anunció la detección de anticuerpos anti-ERV en otras cuatro personas: dos granjeros de Bulacán y otro de Pangasinán (las dos granjas, ambas en el norte de Luzón, están en cuarentena por haberse detectado infecciones porcinas por ERV) y un carnicero de un matadero de Pangasinán. El caso seropositivo anunciado el 23 de enero tiene una explotación doméstica de cerdos en Ciudad Valenzuela (un barrio del área metropolitana de Manila).
Unos 6000 cerdos de una explotación ganadera situada al norte de Manila fueron sacrificados para impedir la expansión de una epidemia del virus Ébola-Reston.
Estos recientes casos en Filipinas representan la primera vez que el Ébola-Reston ha sido detectado en cerdos, y también la primera vez que se sospecha una transmisión del virus Ébola-Reston desde el cerdo al ser humano.
La epidemia acabó causando 151 muertes entre las 285 personas que resultaron infectadas.
Cepa Ébola-Tai-Forest

Este subtipo de Ébola fue descubierto entre los chimpancés de los bosques de Thai en Costa de Marfil. El 1 de noviembre de 1994, se encontraron los cadáveres de dos chimpancés en este bosque. Las autopsias revelaron que había sangre marrón en el corazón de los dos chimpancés, y que uno de ellos presentaba los pulmones encharcados de sangre. Los estudios de los tejidos tomados de los chimpancés arrojaron muchas similitudes con la cepa Ébola-Zaire que durante 1976 causó estragos en Zaire y Sudán. Más tarde, en 1994, se encontraron más chimpancés muertos, muchos de ellos dieron positivo al Ébola tras utilizarse tests moleculares. Se cree que el origen del brote fue la carne de algunos monos infectados de la especie Colobus roja que los chimpancés atacaban. Una de los científicos que llevaron a cabo las autopsias de los chimpancés infectados contrajo Ébola. Desarrolló los primeros síntomas, similares al dengue o la malaria, aproximadamente una semana después de las autopsias. Fue transportada a Suiza para recibir tratamiento. Dos semanas después fue dada de alta, y seis semanas después de la infección estaba completamente recuperada.
Cepa Ébola Bundibugyo

El 29 de noviembre de 2007, el ministro ugandés de Salud confirmó que la fiebre hemorrágica que ha matado al menos a 35 personas y que ha infectado a 127 en Uganda, ha sido provocada por el virus del Ébola. Las muertes se registraron en la región de Bundibugyo, en la frontera con la República Democrática del Congo. Tras analizar las muestras el Laboratorio Nacional de Estados Unidos y el Centro para el Control de las Enfermedades, la Organización Mundial de la Salud ha confirmado que se trata de una nueva cepa del virus Ébola.